Lo que el celular puede llevarse

Estar inmersos en un mundo virtual, ya sea absortos en una conversación telefónica o enviando mensajitos de texto, causa que los usuarios pierdan de vista la vida. Al menos eso es lo que plantea un reciente estudio realizado por la Universidad de Western Washington (Estados Unidos).

¿Cómo probar ese punto? Ira Hyman, profesor universitario, realizó con la ayuda de sus estudiantes un experimento: uno de sus alumnos se vistió como payaso y recorrió en uniciclo una concurrida plaza durante toda una hora.

Los resultados fueron concluyentes. De las 150 personas entrevistadas, solo el 25% de las que estaban hablando por celular notó que había un payaso por el área. Es decir que, a pesar de los vistosos colores y el hecho de que se transportaba en un uniciclo, el 75% de los consultados no lo notó.

En un estudio anterior, realizado en la misma universidad, se concluyó que los caminantes más distraídos son aquellos que hablan por celular, además caminan usualmente en zigzag y pocas veces reconocen a las personas que transitan a su alrededor.

Causa y efecto

Este no es el primer estudio que demuestra el preocupante efecto que los teléfonos móviles pueden tener sobre la percepción, explica la psicóloga Mitzila Vargas.

Pero este es, en realidad, el primero que comprueba el efecto directo en un escenario real. “Muchos de los estudios eran en laboratorios. Este comprobó realmente que el estar tan inmersos en un mundo tecnológico, como el que proveen los celulares, puede llegar a ser perjudicial”, señala Vargas.

Su peligro, agrega, está en que puede poner a los usuarios en situaciones difíciles y causar accidentes debido a la distracción que representa.

Al concentrarse meramente en el objeto o en la conversación que se tiene a través del mismo, los individuos pierden la habilidad de percibir lo que ocurre a su alrededor, explica la psicóloga Lizbeth Garrido.

“Para muchos, es una manera de abstraerse de un mundo en el que no están realmente a gusto”, señala, recalcando que están tan inmersos en ese otro universo, que el mundo exterior, por más presente y palpable que sea, pasa a un peligroso segundo plano que le da igual tomar en cuenta factores exteriores.

Por lo mismo, recomienda Lizbeth Garrido, estos dispositivos se deben usar tan solo al estar sentado de manera estacionaria, excluyendo caminatas, manejo de vehículos y demás situaciones que requieran que la persona mantenga despiertos sus cinco sentidos.